Saltar al contenido

Hacia un Acercamiento

En el andar de nuestro camino nos vamos dirigiendo en un dirección. Esta dirección es una orientación magnética orientada hacia un propósito, el Plan. Aquello en lo que nos disponemos a participar y ayudar a conseguir, para una común evolución y el Acercamiento a una conciencia mayor.

El camino es ir ascendiendo peldaño a peldaño en la escalera de la conciencia. Y desde el mismo momento en que la ponemos al servicio de la Conciencia Superior, vamos realizando pequeños reconocimientos de nuestra esencia individual.

“Crecemos por medio de nuestros reconocimientos” escribió el Tibetano a una de sus discípulos. “

Cuando se considera un reconocimiento como aspecto o fracción de un todo mayor, constituye la simiente de una mayor expansión de conciencia. Es esencial cultivar la actitud del reconocimiento espiritual y este debe darse en tres áreas: en la esfera Personal, el propio equipo del buscador con sus limitaciones y potencialidades; en la esfera del Alma, el origen de aquella que es; en la esfera Universal, el modelo cósmico y su parte el él.»

Estas esferas básicas de reconocimiento son exploradas con creciente profundidad y comprensión a medida que se huella en el Sendero.

Al igual que en el inicio de cualquier proyecto de la vida, social, primero adquirimos el compromiso, nos preparamos, estudiamos, vamos examinandos y seguidamente lo ponemos a prueba a través de la experimentación y comprobación en la vida común. Y para conseguirlo realizamos un previo acuerdo de trabajo, un acuerdo externo .

De igual modo, avanzando pasito a pasito a través del Sendero, vamos realizando un acuerdo interno. Esos ciertos reconocimientos, van sucediendo en cada uno de los los tres niveles, un acuerdo de trabajo entre nuestra mente y corazón.

La experiencia nos va mostrando, en nuestro paciente esfuerzo y perseverante avanzar, que en el Sendero, el acuerdo interno y externo se va revelando como UNO 

La ciencia espiritual no da respuesta objetiva a preguntas concretas. Sabemos que todos los planetas se mueven, todo está en movimiento, el movimiento provoca vibración y la vibración sonido, ese conjunto de sonidos de sinfonía universal, la música de las esferas. 

Caminamos por un sendero, en el que a menudo nuestros sentidos se quedan cortos.

El órgano de la vista nos brinda ver la materia y sus colores, el gusto, el tacto, la voz para crear vibración, pero estas prestaciones de nuestro vehículo físico, están aún muy lejos de una percepción de la realidad espiritual. El camino espiritual se va refinando a través de los pensamientos, los sentimientos y las acciones. A través del sonido del Silencio, descubrimos algo que llamamos confianza, intuición, el sentir lento y alto dentro de mi, con los demás y dentro del silencio. A través de esa sinfonía del silencio vamos conectamos con nuestra alma planetaria y universal. Vamos realizando un acercamiento hacia Logos Planetario.

Y en nuestro devenir como humanos en la evolución individual y en la de nuestro planeta Tierra. Con la voluntad de hacer las cosas de otra manera, nos vamos relacionando unos con otros, contactándonos como almas, y en la escucha del silencio, nos unimos para crear una forma de vida mejor.

Un acto creador al servicio de un bien común y de un alcance mucho mayor.

 Fomación de Meditación Creativa.

 

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *